La gente de Playground Games vuelve a las rutas con otra entrega de su destacada serie Forza Horizon. Desde 2012, el estudio independiente Británico viene demostrando su enorme capacidad para crear mundos abiertos y representar vehículos con gran detalle, sin restarle importancia a la jugabilidad y a los aspectos visuales y sonoros. No es sorpresa que el resultado vuelva a ser espectacular, sobre todo teniendo en cuenta que PG está compuesto por ex empleados de estudios como Codemasters y Criterion Games -entre otros tantos- que siempre demostraron una destreza enorme en lo que respecta a juegos de carreras.
El Festival Horizon se estableció en Australia y en sus playas, bosques, rutas y pueblos está la variedad necesaria para que FH3 siempre ofrezca “algo más para hacer”.
Carreras de exhibición, recorridos punto a punto contra reloj en zonas donde la naturaleza no permite carreteras, desafíos espontáneos contra otros conductores, armar tu propia caravana de vehículos para recorrer el hermoso y detallado mundo abierto al tiempo que descubren nuevas vistas o suman más gente que los acompañe… el espectro de oportunidades es grande, y eso es un punto fundamental en un juego de carreras de mundo abierto. Y a todo esto, también se le suma el modo fotográfico, en el que podemos pasar horas armando la toma perfecta tanto para un Buggie maltratado en la costa australiana, como para un Koenigsegg Agera en la noche de la ciudad.
Aunque el mapa no es tan extenso como el de The Crew, es en variedad en donde Forza Horizon 3 se lleva los laureles. De hecho el detalle es tan interesante que muchas veces es más tentador manejar sin destino alguno que participar de los eventos del festival. El impresionante detalle gráfico supera el aspecto técnico tradicional, y es la dirección de arte la que hace que el mundo se sienta tan real como pocos juegos pueden lograrlo. Salir de una ciudad con destino a una montaña, por ejemplo, nos lleva por caminos de transición como los que en la realidad se ven entre pueblo y pueblo. Con infinitas rotondas, vegetación que va cambiando a medida que nos acercamos al bosque o simplemente el tráfico que se vuelve más denso y lento en los puntos clave de las rutas.
Fueron los impresionantes gráficos y la hermosa iluminación lo que pusieron, en mi caso, la prioridad en los paseos antes que las carreras y la expansión del Festival -una gran responsabilidad, puesto que esta vez no estamos en la piel de un simple competidor únicamente, si no del organizador del evento-. Salir de la playa en una SUV y conducir a campo traviesa buscando la selva más cercana, cambiar de vehículo y andar por arroyos hasta llegar a una ruta, en la que nuevamente cambio y me subo a un BMW o un Pagani de última generación para recorrerla a 250 km/h… la experiencia es hermosa y satisfactoria, y Forza no penaliza este tipo de actividades.
Pero el juego no es un simulador de vacaciones ideales para fanáticos de los paisajes. Hay que ponerse los pantalones ignífugos y expandir el evento principal, con nuevos conductores y bases, desbloqueando carreras y otros objetivos. Y ahí es en donde entra en juego el enorme abanico de posibilidades que Forza Horizon 3 ofrece en relación a los vehículos. Éstos se pueden comprar normalmente en la tienda de juego, a través de subastas en las que competimos contra otros jugadores, o pueden ser premios recibidos de eventos específicos.
Y al igual que en entregas anteriores, siempre podemos buscar autos abandonados, escondidos por el mapa, que automáticamente se agregan a nuestro garaje. Lo interesante de esto es que la sorpresa en general no decepciona, y sin necesidad de jugar 400 carerras para ganar créditos como en juegos de simulación de carrera, podemos tener rápidamente a una Ferrari y usarla de la forma que queramos. Las principales marcas están representadas en los más de 350 vehículos que están disponibles inicialmente.
Con el auto a nuestra disposición nos podemos meter en el mundo de personalizaciones ya clásico de los Forza: Pintura, decoraciones, nuevas partes, bocinas (si! desde las típicas aburridas de calle hasta musicales) modificaciones de piezas y customización al detalle. No es necesario ser un gran artista o saber qué es un árbol de levas para disfrutar de esta característica. El juego permite descargar diseños y modificaciones hechas por otros usuarios para poder tener una bestia de la velocidad sin necesidad de tocar nada que no sepamos para qué sirve. También existen habilidades especiales que se compran con puntos obtenidos a través de la XP, y se dividen en 3 categorías: una para el festival, otra para la conducción y la tercera para el modo multiplayer.
Por otro lado, la personalización no está restringida al auto. Nuestro personaje ahora puede tener su propia imagen y un nombre o apodo. Hay una enorme variedad para elegir, y cada uno fue grabado por los actores de voz del juego. No es la primera vez que un juego hace esto, pero igualmente sigue siendo lindo escuchar tu nombre cuando alguno de los personajes –Keira, la asistente del organizador, Warren, el mecánico o la siempre presente y amable voz del GPS- necesita comunicarse con nosotros por algún motivo.
En el apartado de audio, Forza Horizon 3 también se lleva un buen puntaje. No sólo por el buen sonido de los motores y los efectos, sino también por la música. El juego ofrece una variedad de “radios” predefinidas pero también nos deja escuchar nuestra propia selección de temas a través de Groove. Y no es lo mismo esquivar autos a 200 km/h en la costa de Australia escuchando un pop melódico con toques de rap que con, por ejemplo, Fuel de Metallica. Perdón por la obvia elección. Iron Maiden o Manowar también sirven.
Forza Horizon 3 integra componentes y modos multiplayer casi sin requerir acción por parte nuestra. Simplemente seleccionamos si el modo está activo o no, y el mapa se transforma en un mundo online, más completo e interactivo. Autos de otros corredores que buscan competir o simplemente están admirando los paisajes se suman al plano, pero nuestro propio mundo se mantiene tal cual. Los descubrimientos y desbloqueables también. El mejor agregado online, sin embargo, debe ser la posibilidad de jugar la campaña cooperativa, algo muy poco visto en este tipo de juegos y que hace que jugar con amigos sea más entretenido y variado de lo común ofrecido por juegos de carreras puras.
Con hermosos gráficos y paisajes, sonido óptimo, gran capacidad de personalización y libertad para conducir Forza Horizon 3 es un juego de carreras de mundo abierto que debería estar en la librería de todos los amantes de los autos y el manejo virtual.
Y un consejo: al acelerar por las rutas y calles de Australia, recuerden que allá se maneja por el carril contrario. Si nos cruzamos de frente con 20 autos haciéndonos luces y tocando bocina desesperadamente no es error de los locales, sino del jefe del festival que no se informó de las reglas de tránsito antes de subirse a un Lamborghini Aventador en un país que no es el suyo.
A Favor
- Gráficos
- Ambientación de toda Australia
- Jugabilidad
- 350 autos por descubrir
En Contra
- Otra vez el excesivo precio en el Windows Store de Argentina
El juego ya esta disponible en Pc (Windows Store, Windows 10 y Anniversary Update requeridos) y Xbox One bajo el sistema Xbox Play Anywhere, si te compras el juego en Xbox, puedes jugarlo en Pc y viceversa.
